Wake up

Por qué Alejandra Guzmán es considerada como una diva del rock mexicano?, si en realidad es una popstar con una actitud un poquititito más atrevida que Paulina Rubio o alguna otra de esas zulipantras tan conocidas.

Por qué Maná es una banda de rock representativa de México, si lo que toca son ritmos latinoamericanos y sus letras son más o igual de cursis que las del tal Arjona?

Por qué Panda es una banda considerada por los medios como de lo mejor que existe en la escena rockera del país?, si ya todos conocemos la historia de sus descarados plagios a Green Day, My Chemichal Romance y Taking Back Sunday, entre otros.

En el famosísimo podcast de Olallo Rubio se dice que lo que le hace falta al rock mexicano para ser chingón son solos de guitarra... a mi me late más que le hace falta ideal. Ya lo he dicho antes, este país es una olla de presión que algún día deberá explotar o al menos empezará a aventar vapor por la válvula. Nuestra situación económica, política y social se agrava cada vez más y las bandas de rock "importantes" siguen calladitas.

Hoy es el narco el que da la noticia, pero desde la era Foxiana ha habido sucesos que atentan contra la población y nadie dice nada.

Una lista rápida de eventos mencionables:

La represión en San Salvador Atenco
La represión en Oaxaca y Ulises Ruiz
El intento de desafuero al Peje
El Fraude electoral y la división política de la población
Los Bribiesca y Marthita
Comes y te vas, Fox vs Fidel
Mexico vs Venezuela, gracias a Fox otra vez
El caso de pedofilia del Gober Precioso y Naciff
La pedofilia en la iglesia
El Peje se deschavetó y dice ser el presidente
La militarización del país
Hildebrando, el cuñado incómodo
La familia Mouriño y sus contratos en Pemex
Calderón reduce presupuesto a la educación y aumenta sueldos a policias y soldados
El aumento sin precedente de la canasta básica
El gasolinazo disfrazado
El narco y su infiltración en todos los niveles de gobierno
El desempleo
El muro fronterizo

Y muchas cosas más que segurito se me olvidan...

Cómo se puede ser Molotov, vivir en este país y seguir sin decir nada por la comodidad de seguirse metiendo varo cantando Chanwich a la Chichona, en lugar de escribir alguna rola que denuncie nuestra situación actual.

Si ustedes tuvieron el chance de ver el documental de Seven Ages of Rock que transmitió recientemente VH1 y se chutaron el episodio dedicado al punk habrán visto la historia de los Sex Pistols, The Clash, Ramones, etc. Bandas que tuvieron que salir a gritar que no estaban de acuerdo con la situación de su país y expusieron ante el mundo lo que ocurría en su comunidad. La escena que más me gusta es cuando Sex Pistols se monta en un barquito, en el Támesis y van a tocar frente al Parlamento la rola de God Saves the Queen, algo que en esos tiempos era casi una herejía.

Acá la situación es muy diferente, si bien se supone que ya existe una libertad de expresión más amplia comparada con el Priato, pero siguen habiendo cosas que se quedan sin decir y la música que se supone debe decir la neta, también se queda callada.

Cuánto tiempo debe pasar para que nos quitemos el velo de los ojos y nos demos cuenta que los medios masivos de comunicación se confabulan con los intereses de los grupos de poder y bloquean todas aquellas oportunidades para que la población se informe adecuadamente. Estamos inmersos en soccer, teletones, novelas y realities de basura, es bien difícil luchar contra todo este aparato que ha venido moldeando la idiosincracia del mexicano que se enorgullece cada vez que en el canal de las estrellas le dicen que debe sentirse orgulloso porque ha dedicado tooooda su vida a trabajar como burro y que ahora debe hacerlo mucho más porque hay una crisis y no hay que bajarle a la cooperacha del teletón.

Esperemos que algo pase para que despierte este país, las nuevas generaciones deben salirse del molde y establecer una nueva óptica que impulse un cambio de ideología hacia una mayor competitividad y el desarrollo de una conciencia crítica.

Y la música, que es el motor que nos mantiene andando todo el día, tiene mucho que ver...